Facundo Martínez

Facundo Martínez

miércoles, 16 de septiembre de 2015

Ritmo, ruido, compas. (1-Mayo-2013)

Viene de nuevo,
1, 2
3, 4.
Infinito 3, 4.
Viene pero nunca se va,
nos recibe, nos tortura, nos despide.
Pero nunca se va.
Miramos la pared tratando de poner la mente en blanco.
Y podemos escucharlo.
Empañamos el vidrio, secamos los platos, cerramos la puerta.
Y podemos escucharlo.
Decimos "mi sentido pésame", besamos una frente fría, esperamos en una silla.
Y podemos escucharlo.
Cada vez el mundo trata de hacerlo desaparecer,
un día mas, y es una muñeca menos que lo tiene.
Pero está (siempre está).
Antes de ser, preguntaban por mi y por el.
Siendo, preguntan por mi y por el.
Cuando deje de ser, van a preguntar por mi, y el va a seguir creciendo.
Nunca se hace pequeño, siempre se desarrolla, siempre acumula.
Siempre nos da miedo.
Siempre suena fuerte cuando queremos silencio.
1, 2
3, 4.
Infinito 3, 4.
(Y puedo escucharlo mientras escribo esto sobre el)
Tic, Tac
Tic, Tac.
Infinito Tic, Tac.

No hay comentarios:

Publicar un comentario